Anuncios
«Vamos más adelante», me dijo María, mi hija, con un tono único y especial, donde se mezclaban un reclamo suave pero firme, propio de una persona madura y decidida, con la frescura de una adolescente.
«Vamos más adelante», me dijo María, mi hija, con un tono único y especial, donde se mezclaban un reclamo suave pero firme, propio de una persona madura y decidida, con la frescura de una adolescente.
http://bible.com/128/PSA35.10 así todo mi ser exclamará: «¿Quién como tú, Señor ? Tú libras de los poderosos a los pobres; a los pobres y necesitados libras de aquellos que los explotan.»