Especialistas del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI) trabajan en la elaboración de nuevas alternativas para agregar valor al suero lácteo, un subproducto altamente nutritivo.
Según informó el instituto en un comunicado de prensa, lograron una bebida adicionada con fibra alimentaria y Lactobacillus casei que podría representar una opción económica y redituable para la pequeña producción.
Este subproducto posee un alto valor nutricional ya que retiene el 55% de los nutrientes de la leche, además de contener proteínas de alto valor biológico.
El Centro INTI-Lácteos trabaja en diferentes alternativas para darle al suero de quesería un valor agregado como materia prima para la elaboración de otros productos.
En esta línea se desarrolló una bebida fermentada adicionada con fibra alimentaria y Lactobacillus casei, una bacteria que se usa para la producción de alimentos probióticos, que contienen microorganismos vivos que pueden beneficiar la salud de quien los consumen.
La bebida desarrollada a partir de suero de quesería líquido tiene una textura y consistencia similar a la de las bebidas comerciales a base a soja, pero contiene todas las proteínas del suero lácteo.
Para su elaboración se utilizó alrededor de un 85% de suero y los sabores más aceptados fueron el natural y manzana.
La cantidad de fibra que contiene cumple con la concentración exigida en el Artículo 1386 del Capítulo XVII del Código Alimentario Argentino (CAA) para bebidas “adicionada con fibra alimentaria” y la cepa de Lactobacillus casei se mantuvo viable durante los 20 días posteriores a la elaboración.
En la Argentina se producen por día 11 millones de litros de suero de quesería, de los cuales sólo el 45% es procesado, según el INTI, siendo principalmente las grandes empresas las que pueden industrializarlo, en la mayoría de los casos, como suero en polvo y concentrado de proteínas.
El 55% restante es utilizado para alimentación animal, por ejemplo, para engorde de terneros (cedido en general en forma gratuita, según el INTI), o volcado al medio ambiente, lo que causa problemas de contaminación ambiental.
El suero posee un alto valor nutritivo, ya que retiene el 55% de los nutrientes de la leche, conteniendo entre sus componentes proteínas de alto valor biológico.
«Teniendo en cuenta esto es muy importante que las empresas, principalmente las pymes queseras, comiencen a darle valor a este subproducto que se obtiene de la elaboración de quesos», afirmó el INTI.
Este tipo de bebidas ya se encuentra en los mercados de otros países latinoamericanos, como Brasil, Colombia y Ecuador, con una amplia variedad y aceptación por parte de los consumidores, de acuerdo al instituto.
El desarrollo de productos de valor agregado a partir de lo que hoy la pyme láctea contabiliza entre las pérdidas y considera un problema ambiental, podría ser un disparador para que las empresas sigan este modelo de optimización de los recursos, maximización de las ganancias y protección del ambiente.