Vivimos en un mundo en donde parece inevitable que la identidad y datos personales sean robados en algún momento. Sólo hace falta recordar los incidentes de las cadenas minoristas del año pasado en Estados Unidos para plantear una hipótesis de fragilidad del sistema financiero sobre la seguridad de la información y el resguardo de la privacidad.
Los consumidores lamentablemente no están preparados para hacer frente a las consecuencias financieras que se derivan de un robo de identidad, y desconocen qué medidas deben tomar en caso de ser víctima de un ataque para proteger su información personal y financiera.
Por esto, lo primero que debemos hacer es trabajar sobre la prevención para evitar que roben sus datos y claves entre otros datos sensibles.
Seguir leyendo Cómo reducir el impacto financiero ante un robo de identidad