Con el auge de las plataformas digitales, surgieron las noticias falsas («fake news»). Enlaces maliciosos, textos reenviados en largas cadenas de mensajes, son algunas de las formas que toman las noticias falsas para propagarse.
El éxito de las noticias falsas reside en la difusión masiva entre usuarios, quienes comparten esta información buscando alertar a otras personas sobre un hecho y, sin darse cuenta, están propagando una noticia falsa.
Las noticias falsas abundan en el ecosistema digital y crecen en situaciones específicas como períodos electorales o frente a sucesos de amplia visibilidad pública.
Una vez que se identifica una noticia falsa es fundamental frenar su viralización: dejar de compartirla en redes sociales, denunciar la publicación de ser posible y alertar a la persona que la envió, si fuera el caso. De esta forma, se evitan sesgos y se disminuye la propagación de la desinformación.
En el laboratorio de la empresa de seguridad informática BTR descubrieron un vínculo entre las personas que compartían información con comportamientos asociados a reacciones de emergencia y emoción.
A partir del análisis de las respuestas aportadas por más de 900 personas, identificaron el anonimato, la suplantación de identidad y el empleo de las plataformas tecnológicas y bots como factores en común para engañar.
El coronavirus y el aislamiento de las personas fueron el escenario ideal para la difusión de noticias falsas. Según BTR, el top 12 de las noticias que circularon a través de las distintas plataformas, tuvo que ver con el origen del virus, personalidades afectadas y métodos para prevenir o combatir el contagio.
«Más de la mitad de la información que circula en diferentes plataformas proviene de fuentes no tradicionales», destacaron desde BTR. Este fenómeno dio lugar al término «infodemia» para describir este conjunto de información que rodea a la Covid-19. Se refiere a una avalancha de información y al hecho de que no está verificada y gran parte de ella probablemente no sea precisa.
Otro punto destacado es el concepto de «Deep fake». Corresponde a videos falsos hechos con software de inteligencia artificial, para representar a personas haciendo cosas que nunca han hecho, o hacer que parezcan decir cosas que nunca han dicho.
«El 53% de los encuestados dijo que estaba al tanto de los deep fakes, de los cuales una de cada tres informó haber compartido contenido en las redes sociales que posteriormente descubrieron que era falso», dice el análisis que me compartió BTR.
Puedes leer más sobre este tema en la nota propia que publiqué en iProfesional aquí.