Las siguientes respuestas forman parte de la encuesta “Las novedades del año viejo 2025”. Más información sobre esta encuesta aquí.
Muchas gracias nuevamente por convocarme y por dar este espacio a los colegas para que podamos expresarnos, hacer un balance y, de paso, dejar registro de estos años para poder recuperarlo a futuro con ojos distintos.
Cultura y arte
Amé Saraos Uranistas, una comedia musical queer que recomiendo a todo el mundo (y, afortunadamente, reponen en febrero). Y me encantó Un millón de cuartos propios, de Tamara Tenenbaum, un ensayo que va mucho más allá de la relectura de Un cuarto propio de Virginia Woolf para ahondar en cuestiones ligadas a la escritura y a sus condiciones materiales de producción, que me interpelaron de lleno.
Gastronomía
Probé dos platos que se comen con las manos. Primero, el beyaynetu, una bandeja etíope con guisos y pastas servidos sobre injera, pan fermentado que hace de plato y de cubierto. Después, un sadya del sur de la India: distintas preparaciones vegetarianas y arroz sobre hojas de plátano (la parte de comer arroz con las manos recomiendo salteársela 😉 ).
Tecnologías de la información y la comunicación
Me puse al día con Notion, para armar mi portfolio de trabajos de comunicación y contenido y, también, con la versión profesional de CapCut, para editar videos cortos para Instagram y TikTok, tarea que todavía me resulta algo ajena pero que juzgo necesaria como canal de difusión del trabajo periodístico.
Experiencias y viajes
Viví cinco meses en Berlín, los primeros dos con una beca periodística del Internationale Journalisten Programme (IJP), que me permitió no sólo trabajar en un medio alemán sino también profundizar en la lógica urbana de una capital que ya había visitado pero nunca realmente habitado. Y fui por primera vez a Delhi, en el marco de un viaje de estudio sobre movilidad organizado por la Global Network of Popular Transportation (GNPT), una experiencia que, aunque breve, me abrió ojos y oídos a problemáticas de género y transporte muy distintas a las que había analizado hasta entonces.
Logros
Sí, metas, logros y algunos sueños. Trabajé desde Berlín para elDiarioAR, Acción e Infobae en español, y para Table.Briefings en alemán. Publiqué columnas urbanas desde Buenos Aires, Berlín y Delhi. Y me di el gusto de explorar el periodismo tenístico, una cuenta pendiente de mis años mozos que me atreví a recuperar desde Alemania para medios argentinos, animada por la distancia con mi país (lejos de casa es más fácil allanar nuevos terrenos en todo sentido) y que, paradójicamente, ahora retomé en Buenos Aires para una revista alemana especializada.
Más allá del periodismo, la inminencia de la beca del IJP me obligó a descartar trabajos fijos y a apostar por el formato freelance, lo cual me llevó a consolidar mi expertise en comunicación y estrategia de contenidos para organismos y compañías internacionales. En ese marco, incluso pude retomar la escritura de guiones y storyboards para videos de eventos de comunicación interna, una veta que había dejado en pausa desde mis años universitarios.
Espacio libre
Este año entendí que me adapto a cualquier ciudad si puedo leerla caminando. También, que soy mucho más fuerte de lo que creo. Y, por último, que mi meta en 2026 debería ser tener más paciencia y amigarme con que los caminos nunca son como se quiere o como se planea.
Karina Niebla
Periodista | Consultora en Comunicación & Contenidos | Estrategia Digital, Storytelling Urbano y Perspectiva Intercultural.
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