Los incendios en el noroeste de la provincia de Chubut y el sudoeste de la provincia de Río Negro, iniciados en marzo, arrasaron cientos de hectáreas de bosques en zonas de la cordillera de los Andes y la precordillera y destruyeron viviendas en las localidades de la zona, entre ellas El Hoyo.
Ante la grave situación, la municipalidad de la ciudad chubutense de El Hoyo pidió donaciones por transferencias bancarias para ayudar a los damnificados por estso siniestros.
El fuego rodeó El Hoyo y hubo entre 20 y 30 heridos leves, además de varias casas quemadas cuyo número no fue precisado.
Las líneas eléctricas estaban colapsadas, se quemaron transformadores y desconectaron el gas porque los nichos eran «lanzallamas». También había problemas con el suministro de agua.
El incendio más activo descendió desde el cerro Piltiquitrón, entre las ciudades de El Bolsón y Lago Puelo, y obligó a la evacuación por razones preventivas de más de 70 personas; mientras otro número no precisado de autoevacuados también dejaron sus viviendas y fueron llevados a la ciudad de Epuyén, la más segura de la zona.