Ayer, 24 de febrero de 2024, se cumplieron cinco años del último registro con vida de Arshak Karhanyan, un policía porteño de origen armenio. Se trata de imágenes tomadas por cámaras en el barrio porteño de Caballito. Desde ese día no se supo más nada de él.
El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) y la Comisión sobre Desaparición de Personas de las Naciones Unidas se sumaron a la búsqueda de Karhanyan.
El nuevo juez de la causa, Martín Yadarola, hizo lugar a un pedido para que el EAAF se incorpore a la investigación, a partir de una iniciativa de la querella.
El abogado Mariano Przbylski pidió al magistrado que remitiera oficios a los juzgados penales y fiscalías porteños y bonaerenses para que informen si tienen causas con víctimas fallecidas no identificadas desde el 24 de febrero de 2019.
El resultado de la medida fue decenas de casos con víctimas NN, cuyos cuerpos no fueron reclamados y permanecen sin identificar en morgues diferentes.
Con ese dato, la querella postuló la intervención del EAAF para cotejar muestras genéticas de los NN con el patrón de ADN conservado del policía desaparecido.
«No es descabellado pensar que Arshak pueda estar muerto y su cadáver sin identificar», explicó el abogado Przbylski, citado por la agencia Noticias Argentinas.
El EAAF designó para esa tarea a Carlos Somigliana, quien ya recibió una primera entrega de material y en los próximos días presentará un plan de trabajo al juzgado para avanzar con los estudios comparativos de ADN.
«En la causa no hay una hipótesis de qué pudo haber pasado porque se arruinaron las principales pruebas al principio de la investigación: las cámaras de seguridad, las conversaciones del teléfono. Por eso lo recusamos al anterior juez, Alberto Baños», explicó Przbylski.
Baños renunció como juez en 2023 y está al frente de la Secretaría de Derechos Humanos, que depende del Ministerio de Justicia. Asumió bajo la administración Milei.
La investigación está «en una virtual parálisis», describió Przbylski. La intervención del EAAF tiene como objetivo «encontrarlo, aunque ello significaría que estaría muerto. Y si es así, ver en el expediente qué fue lo que ocurrió para, de esa manera, reconstruir toda la historia», añadió el letrado querellante.
Reclamo por Arshak Karhanyan ante la ONU
La madre de madre de Karhanyan, Vardush «Rosita» Danytian (en la foto superior, en un acto en el 2021), y la Red Federal de Derechos Humanos, presentaron una solicitud de «acción urgente» ante el Comité contra la Desaparición Forzada de la ONU «con el fin de que intervenga para asegurar la búsqueda del paradero del joven policía y la investigación de lo sucedido y determinar responsables».
«La medida es una petición al Comité para que intime al Estado argentino para que tome inmediatamente todas las medidas necesarias para buscar, localizar y proteger a una persona desaparecida y para investigar la desaparición», explicó la Red en un documento.
«Una vez que acepta el caso, el Comité mantiene abierta la Acción Urgente hasta que la persona desaparecida haya sido localizada», precisó.
El policía fue visto por última vez el domingo 24 de febrero de 2019, cuando tras conversar durante 20 minutos con un colega en la puerta de su casa fue hasta un supermercado Easy, especializado en la construcción, compró una pala y salió con rumbo desconocido.
Karhanyan trabajó en el área de Cibercrimen de la Policía local, que intervino en el primer tramo de la investigación sobre la muerte del fiscal Alberto Nisman, y también participó de un operativo vinculado con una carrera ilegal de automóviles en el Centro porteño que involucró a un empresario contratista de servicios públicos en la Capital Federal. La investigación está caratulada como «averiguación de paradero».
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