Los movimientos de los dedos en un teclado y un mouse eran los únicos mecanismos de interfaz entre el hombre y la computadora hasta hace pocos años.
Sin embargo, el avance indetenible de las tecnologías de la información transformarán ese vínculo hacia un escenario donde predominará lo sensorial, con un número creciente de objetos serán inteligentes y conectados a la web y en el que la informática será una “extensión” de los usuarios gracias a los dispositivos “vestibles”.
Comprobé de primera mano los avances en esta materia en la reunión anual de desarrolladores (IDF, sigla en inglés) de Intel, el mayor fabricante mundial de procesadores, realizada entre el 17 y el 20 de agosto en la ciudad estadounidense de San Francisco.
“Las computadoras están en nuestros escritorios, nuestras mochilas, nuestra ropa, en nuestras casas y nuestros cuerpos”, describió el consejero delegado de la compañía, Brian Krzanich, ante unos 7 mil participantes en el encuentro, quienes observaron que la experiencia informática es cada vez más personalizada.
Puedes leer más sobre esta tendencia en esta nota que escribí y publiqué en iProfesional.