En el Congreso Latinoamericano de Publicidad, que tuvo lugar el 6 y 7 de marzo, profesionales del sector analizaron la imagen y el rol de la mujer, a partir de una investigación efectuada por la consultora D’Alessio IROL para la Asociación Argentina de Publicidad (AAP).
El estudio, cuyo resumen me envió la AAP, reveló que un 80% de las mujeres argentinas no se sienten identificadas con la publicidad.
Entre las cosas que más molestan se mencionaron los modelos de belleza irreales (55%), la exigencia de ser “mujeres maravilla” (36%), la relación con productos de limpieza y tareas del hogar (36%), la exhibición de la mujer como trofeo (34%) y la imagen de compradora compulsiva (33%).
La encuesta se efectuó sobre 724 mujeres mayores de 18 años de todo el país.
Un 69% de ellas manifestó una percepción negativa sobre la imagen femenina en los anuncios publicitarios, ya sea porque éstos reproducen estereotipos perjudiciales o porque no se adaptan a los movimientos sociales que se desarrollan en la actualidad.
Según datos de un relevamiento entre agencias de la AAP, la publicidad es una de las industrias más inclusivas, ya que emplea hombres y mujeres en iguales cantidades.
En más del 42% de las agencias, las mujeres exceden el 50% de la nómina, aunque la proporción no se mantiene igual en todas las áreas.
A raíz de esto, en el marco del Congreso Latinoamericano de Publicidad, se generó el debate en el panel “Mad Women”, donde mujeres que ocupan altos cargos en el área creatividad analizaron los problemas de género.
Patricia Martin, gerente general de la AAP; Ana Ríos y Vanina Rudaeff, directora general creativa y director general ejecutiva de JWT Argentina respectivamente; «Lily» Ann Martin, redactora publicitaria de la AAP, Pol-Ka Producciones y Telefé; Teresa Donato, redactora creativa de producciones de televisión en Telefé; Keren Weinstein y Mercedes Tiagonne, socias de CHICS by MER y KER, reflexionaron sobre su trayectoria laboral.
Uno de los temas de debate fue por qué pese a que haya mujeres que trabajan en el rubro publicitario, el producto final sigue incomodando a las espectadoras.
Frente a esta situación, las creativas coincidieron sobre que, más allá de los deseos de innovar, en el trabajo cotidiano los estereotipos siguen presentes incluso en las mujeres.
Por esto, en las pruebas publicitarias, las propias mujeres eligen modelos tradicionales o con aristas machistas.
Por lo tanto, para el sector publicitario la ruptura con los paradigmas que funcionan hace décadas es todo un desafío, que abarca a los creativos y a los anunciantes, pero va mucho más allá e involucra a la sociedad en su conjunto.
“Nosotras, como creativas, tratamos de salir de ese lugar, pero es algo que se viene arrastrando hace muchos años”, comentó Ríos.
“Las marcas están buscando cambiar la imagen de la mujer en los anuncios, pero todavía estas publicidades son aceptadas en muchos sectores sociales. Lograr un cambio real es un proceso que ya está en marcha, pero va a llevar años”, agregó.