La empresa inicial chilena Rocketpin llegó a la Argentina de la mano de Wayra, la aceleradora de «startups» del grupo Telefónica, para ampliar su red de compradores misteriosos («mistery shoppers»), una técnica utilizada por las empresas para evaluar y medir la calidad en la atención al cliente.
Rocketpin es una plataforma de colaboración abierta distribuida («crowdsourcing») que, basada en una red de compradores capacitados, registra información en terreno para promover la interacción de las marcas con sus clientes reales y potenciales.
La compañía fue creada por Diego y Raúl Reeves hace dos años en Chile, donde hoy cuenta con 20 mil usuarios activos, según me informó Wayra en un comunicado.
En 2017 la empresa triplicó la facturación obtenida en 2016, gracias a más de 200 campañas para empresas de distintas industrias, como retail, consumo masivo, estaciones de servicio, cadenas de restaurantes y bancos.
Rocketpin cuenta hoy con una red de más de 50 mil personas que recogen información en campo en la Argentina y Chile.
Este conjunto de compradores monitorea datos de stock y precios, promociones, protocolos de atención y ventas.
Todos los trabajos son geolocalizados, se generan audios automáticos de todas las visitas y se verifican los tiempos de duración, entre otras instancias de seguridad.
Esta aplicación premia a sus usuarios por realizar pequeños trabajos, de manera independiente, como ir a un supermercado, farmacia o local a revisar cómo están exhibidos los productos o convertirse en clientes incógnitos en estaciones de servicio o restaurantes.
El premio consiste en pagos que se hacen de acuerdo al cumplimiento de las tareas encargadas en la aplicación móvil, pueden ser en dinero, datos para el celular o recargas a la tarjeta SUBE.
Como requisitos fundamentales para ser un «agente» (así los denomina la compañía), hay que ser mayor de 18 años, realizar las primeras «misiones de entrenamiento» en forma directa desde la aplicación y también tener una cuenta en la plataforma Mercado Pago.
«Es ideal para los estudiantes, jubilados y personas que trabajan de forma independiente. Lo único que se necesita es un ‘smartphone’, tener más de 18 años y una cuenta en Mercado Pago. Universitarios, trabajadores independientes, adultos de la tercera edad, en fin, Rocketpin es para todos, porque es sumamente fácil de utilizar”, comentó Raúl Reeves, gerente comercial de la empresa.
«Las empresas de consumo masivo nos piden que levantemos información de promociones, precios u ofertas en supermercados y autoservicios donde se exhiben sus productos. Por otro lado, a las empresas de retail, cadenas de restaurantes y servicios en general, les interesa saber cómo están atendiendo en sus puntos de venta», explicó.
La aplicación, disponible para los sistemas operatuvos iOS y Android, obliga a que el equipo tenga habilitada su ubicación geográfica, lo que permite comprobar que los compradores se encuentren en el lugar correcto, donde deben tomar fotografías, responder una encuesta y agregar un breve comentario.
Además de un entrenamiento inicial, todos los «agentes» son autenticados en forma biométrica y deben aprobar las capacitaciones antes de postular a los trabajos disponibles.
En 2016, Rocketpin recibió inversión de Wayra Chile. Este ingreso de fondos «ha sido clave en el desarrollo de Rocketpin. No sólo por el conocimiento y capital aportado, sino que también es una validación muy potente en la industria. No es casualidad que la mayoría de las inversiones de los venture capital se hagan en ‘startups’ que hayan pasado por Wayra. Hay un tremendo equipo dedicado al escalamiento de tu emprendimiento», finalizó Reeves.