Nodo solidario: Serie de libros para niños "Me quedo en casa"

La siguiente nota pertenece a «Nodo solidario», una iniciativa de este sitio web para difundir emprendimientos personales en el marco de la pandemia del coronavirus y las medidas de confinamiento social para ralentizar su propagación.

Si necesitas utilizar este espacio para difundir en forma gratuita tu emprendimiento, solo deberás completar un formulario breve aquí.

Serie «Me quedo en casa». Libros de educación emocional para niños

Esta serie de libros audiovisuales infantiles fue creada en la emergencia sanitaria por coronavirus para acompañar a chicos pequeños en su desarrollo emocional.

Sus autoras, Lucía Romero Fernández (psicóloga) y Silvina Beatriz Sartori (psicopedagoga) –profesionales con amplia experiencia en educación- desarrollaron relatos, en poesía, que permiten que el pequeño lector se conecte con sus sentimientos y a partir de allí pueda pensar el impacto que esta crisis provoca en él, en su familia, en su entorno.

Los libros de esta colección multimedial que fue creada en medio de estas inéditas y particulares circunstancias son:

Dafi se quedó en casa… ¡Aunque no tanto! (Introducción)
Sebi se quedó en casa. Y sintió miedo… ¡Aunque no tanto!
Pilar se quedó en casa. Y sintió tristeza… ¡Aunque no tanto!
Rodrigo se quedó en casa… Y sintió enojo… ¡Aunque no tanto!
Julieta se quedó en casa… Y sintió aburrimiento… ¡Aunque no tanto!

De una manera simple pero realista, estos cuentos describen escenarios como los que muchos chicos pequeños transitan durante la difícil época de pandemia en la cual millones de niños en el mundo deben –al igual que los amigos protagonistas- quedarse en casa.

Algunos se sentirán más identificados con Sebi, o con Pilar. Otros con Julieta o tal vez con Rodrigo, según las emociones que estén vivenciando o hayan experimentado.

Cada libro brinda orientaciones para acompañar la lectura, con sugerencias atendiendo al momento que se atraviesa, validado las emociones pero también, como en las diferentes historias, invita a encontrar maneras de regulación de los sentimientos.

Las ilustraciones ayudan a los más pequeños a construir la trama, los más grandes pueden hacer una comprensión más autónoma sin necesitar de la ayuda del adulto para inferir aquello que cada libro intenta transmitir.

Si bien el desarrollo de esta colección se da un escenario incierto y doloroso, desde un inicio las autoras buscan comunicar un mensaje alentador, y de esperanzada reparación de aquello que podría tramitarse como traumático.

Así, el uso del pasado en las historias augura un final feliz, y permite diseñar -o confirmar, si la lectura se lleva a cabo luego de la pandemia- lo transitorio del estado de emergencia.

Los títulos también hacen referencia a la posibilidad de gestión de esas emociones que cada cuento presenta.

Aquellas disparadas en este tiempo pueden convivir con otras que equilibran, o permiten una mayor regulación en el estado anímico de cada chico.

De esta manera, el contenido de cada cuento valida la emoción que recorre cada historia –miedo, enojo, tristeza, aburrimiento-intenta explicarla en el protagonista y la significa, pero también la “contrapone” a otras emociones o la acompaña con diferentes recursos o ideas para poder contenerla, apaciguarla, redireccionarla… contemplando la etapa evolutiva de los chicos a los que la serie va dirigida.

En la sección de «juegos, actividades, otras propuestas», se ofrecen ideas adicionales para transitar los momentos en los que la emoción del cuento se hace presente.

Las poesías de la serie cuentan además traen sugerencias profesionales (publicación «Niños en cuarentena»), para tener en cuenta durante la crisis y también luego de ella.

Están dirigidas a familias, educadores y/o profesionales de la salud quienes puedan encontrar en este anexo información y recursos para acompañar a los menores.

La colección “Me quedo en casa» busca ser un aporte enriquecedor en estos momentos en los que enseñar, más que nunca, requiere de educación emocional.