Presencié el nuevo espectáculo de la compañía teatral Fuerza Bruta, «Aven, un lugar sin piso» en un predio vecino al club Gimnasia y Esgrima Buenos Aires (GEBA), en los bosques del barrio porteño de Palermo, en un espacio creado para desplegar este show que «busca la felicidad», según sus creadores.
«Buscamos ser libres, recrear elementos y efectos de la naturaleza. Una obra lúdica y con una mirada amorosa, que busca recobrar esa belleza que ya nos es extraña y que nos emociona hasta las lágrimas», explicaron desde Fuerza Bruta cuando se presentó esta apuesta.
El elenco está a cargo de Diqui James (creador y director artístico), Gaby Kerpel (director musical y compositor), Fabio D’Aquila (coordinador general) y Alejandro García (director técnico) que en su recorrido actuó en 56 ciudades de 28 diferentes países, en 2022 con «Wayra», uno sus títulos emblema.
Aven es una palabra abstracta, inventada, «una mezcla de aventura y paraíso», según explicó Fuerza Bruta en un comunicado de su presentación.
Para este espectáculo, Fuerza Bruta creó la sala Sinpiso, «un espacio preparado para que todo suceda, una fábrica de teatralidad, música y celebración que diseñamos y construimos para seguir experimentando y para recibir desafíos artísticos de cualquier parte del mundo».
Con los antecedentes de otros espectáculos de Fuerza Bruta que vi junto a mi familia durante este siglo, como por ejemplo la obra Wayra, no me sorprendió Aven, que observé el 11 de mayo de 2023, en el marco de una celebración de la marca de indumentaria Levi ‘s,
Fuerza Bruta es efectiva en su fórmula, basada en una técnica que apunta de lleno a los sentidos, con imágenes oníricas construidas a partir del movimiento, las formas y los colores, ideales para el registro en fotografías y videos y su publicación posterior en redes sociales como Instagram y TikTok.
La compañía busca recrear un sentido de comunidad en un público que en un espacio muy bien aprovechado.
Al igual que en Wayra, las escenas ocupan escenarios y el aire, irrumpen en cada sector ante los espectadores que se encuentran parados (no hay sillas o butacas) y se mueven por todo el espacio guiados por el staff.
No hay ninguna línea narrativa, como sí sucede, por ejemplo, con los espectáculos de la compañía Cirque du Soleil. Fuerza Bruta apela a los sentidos y se queda en la superficie de imágenes distópicas.
Aven incluye nueve números de los intérpretes en solitario, dúos o entre más personas. Hay momentos musicales, como la apertura, con canto y tambores electrónicos, y de danza, como una coreografía sobre una cinta, compartida entre cuatro.
Predomina la euforia, casi no hay descansos entre cada número del espectáculo. Los bailarines y actores, algunos de los cuales también son músicos, arengan siempre al público. Más que un espectáculo teatral, parece un recital o una rave donde muchos, como un servidor, tomamos fotografías y videos.
También hay espacio para el baile, gracias a la música de Kerpel, en distintas variantes del género tecno.
Con localidades a la venta a través de la plataforma TicketFlash, la puesta de 65 minutos de duración tiene fechas previstas hasta por lo menos el 30 de junio. Hay funciones con restricciones para menores de 18 años.
Hay una modalidad de entrada denominada Fuerza Bruta Lounge, que incluye entre otros ítems, un sector exclusivo ubicado en el entrepiso de la sala, con circulación libre entre la pista y el lounge; ver la entrada en calor del elenco; una barra exclusiva, zona de relax, anfitriones dedicados, y encuentro cara a cara con integrantes del elenco luego del espectáculo.
Galería de fotografías y videos de Fuerza Bruta en Aven
A continuación, una galería de fotografías del espectáculo Aven de Fuerza Bruta que tomé con un teléfono móvil Samsung Galaxy S23 Ultra:
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