El programa de formación Samsung Tech School for Students, dirigido a jóvenes entre 17 y 19 años sin experiencia previa en carreras técnicas, es una actividad certificada por el servicio de atención al cliente de Samsung e impulsado por la empresa Visuar y la Fundación Mirgor.
Según me informó Samsung en un comunicado, el programa avanza en el desarrollo de sus capacitaciones teórico-prácticas para la reparación de productos Samsung.
Esta iniciativa cuenta con el apoyo del sector de prácticas profesionalizantes (sic) del Ministerio de Educación del Gobierno porteño, y de las escuelas técnicas de los partidos bonaerenses de Cañuelas y Escobar.
Como novedad de esta edición, el programa sumó un curso completo de formación enfocado en la reparación de productos de línea blanca de la marca, como heladeras y lavarropas, gracias al centro de capacitación especial creado por Visuar en Cañuelas.
Además, con la incorporación de Fundación Mirgor al programa, la formación teórico-práctica orientada a la reparación de celulares cuenta con una nueva sede para estudiantes coordinada en conjunto con el municipio de Escobar.
Samsung Tech School for Students contó con la participación activa de 50 estudiantes, divididos en grupos de 25. Uno estuvo enfocado en la reparación de celulares, mientras que el otro se dedicó a la reparación de línea blanca.
Al momento de la selección de los participantes, las familias recibieron una carta de felicitación por la elección de su hijo para ser parte de Samsung Tech School for Students y se resaltó la importancia de su acompañamiento en estos proyectos, ya que los estudiantes destinaron más de 70 horas a completar el programa.
Fases de Samsung Tech School for Students
Entre agosto y septiembre, los estudiantes pasaron por las fases del programa, que incluyeron aspectos teóricos y prácticos.
Entre el 22 y el 31 de agosto, participaron en un curso de teoría general que tuvo una duración total de 21 horas. En este curso, los estudiantes participaron en reuniones virtuales con profesores de la Escuela Técnica Roberto Rocca, donde se abordaron conceptos técnicos fundamentales.
Durante estas sesiones, los alumnos de reparación en celulares adquirieron conocimientos relacionados con los componentes de la telefonía móvil, los sistemas operativos y el software, y una introducción a las comunicaciones, redes móviles y conectividad.
En el curso de línea blanca, los estudiantes aprendieron acerca de la seguridad e higiene en el trabajo, los componentes y motores, así como una introducción a los diferentes tipos de funcionamiento y tecno dinámica.
Del 4 al 22 de septiembre, se llevó a cabo la segunda fase del programa, que consistió en un curso presencial de teoría aplicada a la reparación.
Este curso se desarrolló en tres sedes diferentes: la planta de Visuar en Cañuelas, el Centro Metropolitano de Diseño en el barrio porteño de Barracas y el Polo de Educación Superior en Escobar, con una duración total de 20 horas.
Al inicio del curso, los 25 estudiantes que forman parte del grupo de reparación de línea blanca visitaron las instalaciones de Visuar, mientras que el grupo de reparación de celulares visitó las de Mirgor.
Durante estas visitas, los estudiantes interactuaron con profesionales de Samsung que se dedican a la venta de estos productos.
Como etapa final, desde el 26 de septiembre hasta el 9 de octubre, se llevó a cabo el curso práctico en laboratorio de forma presencial, en tres sedes: la planta de Visuar en Cañuelas, el Centro Metropolitano de Diseño y el Polo Tecnológico Fly Tech en Escobar que se inauguró oficialmente con la clase práctica que realizaron los alumnos de Samsung Tech School for Students.
Los participantes también llevaron a cabo, de manera sincrónica con el resto de los cursos, un taller virtual de desarrollo personal y empleabilidad.
En este taller, abordaron aspectos del mundo laboral, la definición de su perfil profesional y el desarrollo de habilidades de comunicación efectiva, empatía y resolución de conflictos, entre otros.
Este taller tuvo una duración de 10 horas, distribuidas a lo largo de todo el programa.
El propósito de este espacio fue permitir que, junto al contenido técnico que estaban estudiando, los alumnos adquirieran y practicaran habilidades blandas que fomentaran su empleabilidad.
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