Una agenda de prensa puede ser entendida como una lista de contactos o voceros de prensa de una organización gubernamental, o una empresa o una entidad de la sociedad civil.
Para los periodistas, una agenda de prensa nos resulta un recurso útil, porque mantiene actualizadas nuestras agendas, y para las empresas de relaciones públicas (RRPP), una oportunidad de aparecer en el radar de los periodistas, más allá de las comunicaciones habituales.
Un buen de ejemplo de esta práctica llegó el 6 de enero de 2021 a mi casilla de correo electrónico, con el siguiente mensaje que me envió Marcela Ernst, directora de cuentas de la agencia Brand Partners:
«Hola Cesar
Espero que hayas comenzado muy bien el año! Quería acercarte un listado actualizado de las cuentas para las que vamos a estar manejando la prensa y las comunicaciones externas en 2021.
Cualquier material o entrevistas vinculadas a estas marcas que requieras para sumar a tus notas, no dejes de contactarme para ayudarte con la gestión de la información.
Un beso y muchas gracias!»
Y a continuación, en el cuerpo del mensaje, la lista de clientes ordenada por grupos de acuerdo con la actividad económica, (retail, tecnología, real estate, etc.); el nombre del cliente con un enlace a su sitio web, una línea de sus actividades y un perfil de cinco o seis renglones.
La lista al estilo de la que envió de Marcela no aparece con frecuencia. Muy pocos colegas suyos replican esta iniciativa, que va más allá del envío habitual de una gacetilla de prensa, que, como lo mencioné en esta nota, sucumbe en un océano insondable de mensajes en una casilla de correo electrónico.
Una actualización periódica de esta nómina de clientes, por ejemplo cada tres o cuatro meses, siempre será bienvenida y utilizada.
También se pueden incluir temas de posibles notas o enlaces a una página web con los últimos comunicados de prensa.
Al respecto, hay una experiencia singular que realizaba una agencia, que puedes leer en la siguiente nota:
Un sumario «runrún» para imitar en las relaciones públicas