Los nuevos casos de lepra detectados en América cayeron 37% en una década, al pasar de 52.435 en 2003 a 33.084 en 2013, según la última información de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
La gran mayoría de los nuevos casos, casi el 94% del total, se reportaron en Brasil.
La lepra es una enfermedad infecciosa crónica causada por una bacteria, informó la OPS en un comunicado de prensa que me envió.
Afecta principalmente la piel, los nervios periféricos, la mucosa de las vías respiratorias altas y los ojos.
La detección temprana de los casos disminuye extraordinariamente los riesgos de deformidades y discapacidad entre los pacientes.
«La lepra tiene cura y el medicamento es gratuito en todos los países», aclaró la OPS.
La proporción de personas con lepra en la región también se redujo progresivamente en esos años, pasando de 0,72 a 0,33 casos por 10 mil habitantes, una disminución del 54,2%.
Si bien la lepra está presente en 24 de 35 países de la región, todos, con la excepción de Brasil, la eliminaron como problema de salud pública (menos de un caso por cada 10 mil habitantes) a nivel nacional.
Al menos 18 países también alcanzaron esa meta a nivel subnacional, es decir, menos de un caso por cada 10 mil habitantes en todos sus estados, departamentos o provincias; y cinco países aún tienen estados o departamentos donde la tasa excede un caso por 10 mil.
“Los países han hecho grandes progresos hacia la reducción de la lepra, pero mantener los logros y seguir avanzando cuando quedan pocos casos es un gran desafío”, señaló el director de Departamento de Enfermedades Transmisibles y Análisis de la Salud, Marcos Espinal.
“Debemos abogar por que la lepra permanezca en las agendas de la salud pública de los países hasta lograr su eliminación”, afirmó.
La estrategia para combatir esta enfermedad consistió en aumentar el acceso al diagnóstico a través de la integración de los servicios de lepra a la atención primaria en salud, la búsqueda activa de casos para asegurar su detección precoz, y el tratamiento sin costo con poliquimioterapia (PQT) para garantizar su curación.
La PQT es donada por la empresa Novartis a través de la OPS a todos los países.
“Para avanzar aún más es importante eliminar el estigma y la discriminación para que los pacientes no duden en buscar atención, siguiendo los principios y directrices del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas”, afirmó el asesor en enfermedades infecciosas desatendidas y lepra de la OPS, Santiago Nicholls.
Los países trabajan para alcanzar o consolidar la eliminación de la enfermedad.
En 2013 y 2014, Brasil intensificó sus acciones e implementó una estrategia novedosa de búsqueda activa de casos, integrada a la desparasitación y al examen de tracoma, en niños en edad escolar.
El Día Mundial de la Lepra se conmemora el último domingo de enero para generar conciencia y reducir el estigma que padecen quienes contraen esta enfermedad.