Las librerías argentinas se encuentran entre los sectores más afectados por la pandemia del coronavirus y las medidas de confinamiento social para ralentizar su propagación.
Según me informó la Fundación El Libro en un comunicado, el segundo año de la pandemia «agudizó la crisis del sector librero». La emergencia sanitaria y la «falta de una política estatal sostenida que proteja al mundo del libro genera que día a día más librerías bajen sus persianas», advirtió la entidad.
El circuito de librerías es un orgullo histórico de la Argentina. Buenos Aires es una de las ciudades del mundo con más librerías por habitante. «Este emblema cultural está siendo puesto en jaque por la pandemia que agudizó algunos de los problemas que viene arrastrando el sector desde hace varios años y que no encuentran respuesta ni en el Gobierno porteño ni en el Gobierno nacional», afirmó la Fundación El Libro.
Las librerías piden una serie de medidas que «podrían traer oxígeno al mundo librero, protegerlo y liberarlo de esta agonía permanente»:
- Exención del IVA, un reclamo que hace varios años es recordado en la inauguración de la Feria del Libro de Buenos Aires y que, si bien, fue otorgado a impresores, editores y distribuidores, continua aun relegando y excluyendo a libreros, por «inexplicables cuestiones de redacción de la ley».
- Sostenimiento de los programas de recuperación productiva (Repro).
- Líneas de crédito hipotecario.
- Tarifas de servicios subsidiadas.
- Exención de impuestos inmobiliarios y del pago de cargas sociales para una cantidad fija de trabajadores.
El Centro porteño es el área de la mayor concentración de librerías y la más afectada, ya que soporta alquileres «elevadísimos y escasa concurrencia de público», por las medidas de confinamiento social.
La Librería de las Luces fue la primera en anunciar su cierre, en octubre.
El cierre de la Librería de las Luces enciende la alarma en el sector editorial @dangigena1 @ferialibro @Editoriales_org @datacultura https://t.co/aAns2JNgPS a través de @LANACION
— LA NACION Cultura (@lncultura) December 12, 2020
En la avenida Corrientes cerraron Mr. Hyde y las dos sucursales de A libro abierto, y Los Argonautas en la avenida de Mayo, y Las mil y una hojas en el barrio de Palermo.
#saldosalert ? Los Argonautas, la histórica librería de saldos de Avenida de Mayo y Florida, cierra ? y está liquidando ?. O sea que es un saldo al cuadrado. Todo a 3 x 100. Lamentablemente recién me entero, y ya llevan más de un mes de liquidación. Hay que buscar con garra. pic.twitter.com/zKU8Prenlk
— marcela basch (@marbasch) January 27, 2020
En julio, la lista se incrementó con los cierres de Librería Waldhuter, el anexo de Librería Hernández, y El Aleph en la capital bonaerense de La Plata.
Cerró la Librería Waldhuter. Es triste que cierre una librería. Es triste que sus libreros pierdan su trabajo. Es triste que sus clientes lectores terminen yendo a cadenas. Si compran libros, intenten comprarle a las librerías de sus barrios. El precio es el mismo y se ayuda más.
— Sr. Mendel (@librosmendel) June 12, 2021
Se trata, según la Fundación El Libro, de “una herida abierta que no para de sangrar y que necesita urgente un Estado presente que ayude a contener y suturar estas pérdidas».