Skip to main content

Una fotografía del reportero gráfico Franco Fafasuli (en la imagen superior), sobrino de un servidor, fue seleccionada entre más de 1.700 postuladas para integrar las más de 130 que conforman la 33a. muestra anual de fotoperiodismo argentino que organiza en Buenos Aires la Asociación de Reporteros Gráficos de la República Argentina (ARGRA).

La muestra, inaugurada el 11 de junio, puede visitarse de martes a domingo de 14.00 a 20.00 en el Centro Cultural Borges, Viamonte 525, Buenos Aires. La entrada es libre y gratuita. Estará abierta hasta el 7 de agosto.

Alejado del territorio argentino, a la altura de Chubut, Franco atrapó imágenes donde la Armada argentina realizó un operativo aéreo y marítimo en la milla 200, con el fin de controlar la pesca ilegal, en el límite de la zona económica exclusiva argentina.

Franco reveló cómo con obscenidad, a casi 400 kilómetros de la costa, unos 300 buques pesqueros de diversas nacionalidades, que parecen puntos luminosos sobre el gran océano, realizan actividades ilegales.

La mayoría pesca durante la noche y la madrugada, con luces que apuntan al agua para atraer a los calamares, el principal atractivo.

La muestra, que tiene más de 130 imágenes de 64 autores, incluye el triunfo argentino en la Copa América 2021, el festejo de los 70 años del músico Charly García y hechos sociales, políticos y artísticos, entre otros temas.

Las imágenes fueron seleccionadas entre 1.700 fotos enviadas por reporteros gráficos de todo el país para esta exhibición única en la historia de la fotografía argentina que tuvo su primera edición en 1980.

A continuación, te comparto el texto de Sonia Tessa que forma parte del anuario de ARGRA.

El río Paraná menguado, como si estuviera en retirada de este mundo. El fuego imponiendo su fuerza en el Parque Nacional Ciervo de los Pantanos. El sedimento que tapa una casa donde hubo un lago. La tierra abriéndose por un terremoto en San Juan.

Como cada año, la muestra de aRGra hace foco en la urgencia y dispara.

La urgencia es evidente: cuidar nuestro lugar común, la tierra.

Disparar, así le dicen lxs fotógrafxs al acto de hacer click. Antes, hicieron kilómetros, se agacharon, se subieron a alguna silla, buscaron el mejor ángulo, encontraron el encuadre.

¿Qué se dispara cuando cada unx de lxs reporterxs gráficxs pone en marcha ese dispositivo de sentido que es una foto?

Cada imagen puede mirarse de diferentes maneras, por supuesto. Muchísimo más el conjunto de fotos heterogéneas de esta muestra.

Una exposición anual inédita en el mundo, que funciona de una forma mucho más compleja que un anuario. Es, claro, un repaso de lo más importante que ocurrió durante doce meses pero es también la exhibición del compromiso, las obsesiones de lxs trabajadorxs de la fotografía, sus desvelos para revelar lo velado, mostrar lo que debe ser visto.

El abrazo de una familia tras una sentencia por femicidio, la mirada potente de una pescadora a través de sus redes, otra mujer mira hacia arriba mientras levanta un enorme canasto de frutas y verduras con el que cocinará en un comedor comunitario, los ojos del padre de Tehuel de la Torre reclamando saber dónde está, el cumpleaños número 60 de una travesti que sobrevivió a todas las violencias y se ríe.

Las fotos cuentan cómo se transforma una sociedad, cómo sale a la calle.

Sus autorxs eligen con dedicación cuál de todas las imágenes que crearon durante el año quieren dejar como huella, como sentido trascendente. Porque la muestra de aRGra es la oportunidad de componer una mirada editorial colectiva. Que trasciende el presente y forma parte de la memoria social.

Las vacunas, el cuidado de la salud, fue otra de las emergencias de un año que comenzó con la novedad de la vacunación masiva y terminó con millones de dosis aplicadas, el derecho ejercido.

La vuelta a los encuentros, la esperanza de retomar los rituales, tienen su espacio en una serie que también les da lugar a los festejos tan esperados. Messi acuna la Copa América casi como a un bebé.

La mirada nunca es inocente, y en este caso, tampoco es complaciente. Todo eso lo saben de sobra lxs reporterxs y lo ponen en acción en su trabajo cotidiano.

¿Cómo se hace sino para captar ese gesto, ese momento, en el que los sentidos se subvierten?

Son sus fotos las que desnudan el carácter profundamente violento de las nuevas derechas. Las que muestran a pibxs festejando el insulto y a un custodio en el mismo momento de la amenaza.

Los feminismos cambiaron la manera de mirar de toda la sociedad. Lo que antes se escondía abajo de la alfombra, hoy se ventila, se sacude, se hace visible como las partículas bajo la luz del sol.

Esa nueva luz que trajo un movimiento social heterogéneo, masivo y revolucionario también ilumina estas fotos, incluso las de aquellxs reporterxs que jamás se calificarían como feministas. Porque es una luz presente, más allá de la voluntad, y así también devela claroscuros.

Por todas esas razones, la muestra de aRGra es mucho más que una tradición: es un ritual de festejo de las miradas.


Si te gustó o sirvió algo que publiqué, te ofrezco dos alternativas para agradecer y permitir la continuidad de mi trabajo en Bahía César, haciendo clic sobre ellas:

César Dergarabedian

Soy periodista. Trabajo en medios de comunicación en Buenos Aires, Argentina, desde 1986. Especializado en tecnologías de la información y la comunicación. Analista en medios de comunicación social graduado en la Universidad del Salvador. Ganador de los premios Sadosky a la Inteligencia Argentina en las categorías de Investigación periodística y de Innovación Periodística, y del premio al Mejor Trabajo Periodístico en Seguridad Informática otorgado por la empresa ESET Latinoamérica. Coautor del libro "Historias de San Luis Digital" junto a Andrea Catalano. Elegido por Social Geek como uno de los "15 editores de tecnología más influyentes en América latina".

Deja un comentario

A %d blogueros les gusta esto: