Por segundo año consecutivo, Tecso, la cooperativa de software más importante de la Argentina, fue nombrada empresa B «Best for the World» («Lo mejor para el mundo) 2022 en reconocimiento a su impacto positivo en el área de trabajadores.
Nacida en la ciudad santafesina de Rosario, esta cooperativa de software fue reconocida por la organización no gubernamental (ONG) estadounidense B-Lab.
La cooperativa de software tiene oficinas en las ciudades argentinas de Buenos Aires, Rosario y Concepción del Uruguay y en la ciudad colombiana de Medellín.
Próxima a cumplir sus 20 años de vida, esta cooperativa de software alcanzó esta distinción gracias a iniciativas que ponen como protagonistas del negocio a sus trabajadores y asociados.
Según me informó Tecso en un comunicado, la cooperativa de software tiene un modelo de negocio horizontal, donde cada uno de sus integrantes tiene voz y voto en las decisiones de la compañía.
La distinción destaca la política de beneficios de la cooperativa de software, su clima laboral, los proyectos innovadores en los que participa y un factor clave y diferenciador dentro de las empresas informáticas: la participación en las ganancias del negocio.
Best for the World es una distinción otorgada por B-Lab a las empresas B certificadas cuyas puntuaciones de impacto B verificadas en las cinco áreas de impacto incluidas en la evaluación de Impacto B (comunidad, clientes, medio ambiente, gobernanza y trabajadores) se sitúan en el 5% superior de todas las empresas B de su respectivo grupo de tamaño.
Cada año, Best for the World reconoce a las empresas B de mejor desempeño que crean el mayor impacto positivo a través de su actividad.
Best for the World ofrece a las empresas reconocidas la oportunidad de compartir conocimientos, aprendizajes y mejores prácticas con la comunidad de empresas B y con empresas por fuera de la comunidad para fomentar la innovación y la transformación en todo el sector empresarial.
El reconocimiento es otorgado por B-Lab, una red mundial sin fines de lucro que certifica y moviliza a las empresas B, compañías que cumplen con altos estándares de desempeño social y ambiental positivo, responsabilidad y transparencia.
Hay más de 5.000 empresas B en 80 países y 155 sectores, unidas por un objetivo común: construir un sistema económico inclusivo, equitativo y regenerativo.
La certificación de empresa B evalúa un producto o servicio y también el impacto social y medioambiental global de la empresa que lo respalda.
Para conseguir la certificación de empresa B, una compañía debe alcanzar una puntuación de al menos 80 puntos en la evaluación de impacto B, una evaluación del impacto positivo de la firma, y superar una revisión de riesgos, una evaluación del impacto negativo.
También debe tener una estructura de gobierno corporativo para rendir cuentas a todas las partes interesadas, más allá de los accionistas.
Un factor clave es la transparencia: una empresa B debe permitir que la información sobre su desempeño en la certificación esté disponible al público en su perfil en el sitio web de B-Lab.
Si te gustó o sirvió algo que publiqué, te ofrezco dos alternativas para agradecer y permitir la continuidad de mi trabajo en Bahía César, haciendo clic sobre ellas: