Las antenas de telefonía móvil no representan riesgos para la salud humana, de acuerdo a estudios e investigaciones oficiales, según afirmó la organización privada 5G Américas.
Ante la circulación de rumores e información falsa y sin fundamento sobre supuestos riesgos para la salud de las personas, 5G Americas recordó en un comunicado que me envió que no existe evidencia científica de que las redes de telecomunicaciones móviles sujetas a estándares internacionales provoquen efectos adversos para la salud de las personas.
Estudios e investigaciones de diversos organismos a nivel mundial determinaron que la exposición a las emisiones de radiación no ionizante (RNI) de las redes de telecomunicaciones inalámbricas no conduce a efectos adversos para la salud pública, si están por debajo de los límites recomendados por la Comisión Internacional de Protección contra la Radiación No Ionizante (ICNIRP, sigla en inglés).
Entre las agencias y organismos que se han pronunciado sobre el tema, se encuentran la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Comité Científico sobre Riesgos para la Salud Emergentes y Recientemente Identificados (SCENIHR) de la Unión Europea y la ICNIRP, entre otros.
Para contribuir a la información responsable, 5G Americas ha publicado una página informativa con recursos relacionados con las telecomunicaciones móviles, incluyendo cuarta y quinta generación (4G y 5G), y su relación con la salud humana, que puede consultarse en español aquí y en inglés aquí.